¿No lo parece? Pues lo es.
¿A caso tiene que verse de manera obvia? ¿Tienen que valorarlo desde fuera? ¿Puede la pared ya serlo desde antes? ¿Puede serlo después?
En muchas ocasiones, las apariencias son solo juicios. Pueden ser tuyos o de otros; pero no dejan de ser pensamientos, no materializaciones definitivas.
Que nadie te diga lo que eres si realmente lo sientes.