El arte de pedir lo imposible

Debo reconocer que me encanta esa sensación extraña cuando te llama uno de tus clientes de mayor confianza y te pide lo imposible. Tanto ese cliente como tú tenéis cierto miedo; pero hay que hacer las cosas, enfrentarse y personalmente, a mí me da mucha seguridad ver como esa persona siente que la ayudo en algo nuevo. Tienen fe en mi criterio y en lo que les puedo aportar.
 
Cualquier reto, por pequeño que sea es necesario. Es importante hacer cosas fuera de lo habitual y más agradecer que vuelvan a contar contigo. Se trata de generar confianza mutua, el compromiso de que saldrá bien y será útil de una forma u otra.

Entradas recomendadas